Alteraciones por estrés
La respuesta Médica
Los psiquiatras, psicólogos y otros especialistas coinciden en afirmar que lo mejor para evitar determinaciones drásticas, de las que después uno se puede arrepentir, es buscar ayuda profesional. Pero lo primero de todo es identificar el estrés. Los expertos aseguran que si la persona se siente identificada con los siguientes puntos, puede que padezca estrés:
A nivel emocional y mental: Dificultad para conciliar el sueño; falta de concentración; pensamientos de tipo obsesivo, ideas repetidas en la cabeza; irritabilidad; estado de tensión fuerte; olvido de cosas; ansiedad; temores irracionales; cambios de temperamento; hiperactividad; soledad (se siente solo aunque esté acompañado); pesadillas; ideas de culpabilidad; y preocupación excesiva.
A nivel físico: Presión alta; crujir de dientes; problemas digestivos; catarros; cambios de peso; dolores de cabeza; estómago oprimido; tensión en las mandíbulas; abuso de alcohol, tabaco...
Cuando se presentan los síntomas, lo adecuado es buscar una solución inmediata.
Se puede acudir a sus propios recursos, es decir tomarse pequeños descansos. (Los descansos van desde altos en la jornada laboral, hasta mini vacaciones que permitan un cambio de panorama en la rutina diaria). También se puede cambiar la dieta y decidirse por otra más saludable y comenzar a realizar ejercicio de manera regular.
Pero si al poner en práctica dichos recursos no hay solución, entonces es necesario acudir a un profesional de salud mental. Se puede acudir a un psiquiatra, psicoterapeuta o a un psicólogo. Dependiendo de cada caso, se prescribirán medicinas o se recurrirá a otros medios como la relajación y el diálogo.
Cabe destacar que consultar un trabajador social clínico, un terapeuta o un psicólogo no es tan costoso como se cree.