Diarrea

La respuesta médica

La diarrea, al igual que el estreñimiento, no es una enfermedad en sí, sino un síntoma de un trastorno cuya gravedad depende de la causa que lo origine. La diarrea se caracteriza por la evacuación frecuente de heces acuosas, sin formar, lo que provoca una escasa absorción de agua y nutrientes. Puede ir o no acompañada de dolor, debilidad, náuseas, vómitos, espasmos abdominales (retortijones), fiebre o pérdida de apetito. El trastorno puede tener su origen en la dieta, infecciones, medicamentos, enfermedades crónicas, estrés emocional, etc. Los medicamentos antidiarréicos van dirigidos a curar los síntomas de la diarrea o bien los trastornos tales como la pérdida de líquidos o electrolitos. Sin embargo, es mejor tratar poco que sobretratar la diarrea, y a veces hay que buscar la causa que la motiva.

Si los síntomas no remiten en un periodo breve de tiempo (48 horas) o hay fiebre alta, dolor abdominal agudo, heces sanguinolentas o malestar intenso, acuda al médico inmediatamente. Igual sucede en casos de diarrea crónica o diarrea aguda grave, en pacientes con historia de enfermedad crónica, como asma, úlcera péptica, enfermedad cardiaca o diabetes. También será necesaria la intervención médica en diarrea de niños menores de tres años, por el mayor peligro de deshidratación que padecen.